miércoles, 20 de noviembre de 2019


Maldito calendario

Son las dos de la mañana,
he perdido el tiempo mirando la televisión,
cambio a Rosario Flores por mi almohada
y pongo el despertador.

Como si fuera un ritual,
miro el teléfono por última vez,
maldito calendario,
que me ha recordado en qué día estamos.

Hace algunos años,
te grabaste en mi memoria,
prometiste no faltar
y ahora se te ha olvidado sin más.

Ojalá que estos días
me cojan desprevenida
y sin querer puedan hacer que sonría.

Ojalá no me acuerde de ti
y no necesite
ver tu fotografía.

Eres un maleducado
que siempre entra sin llamar,
yo no te di permiso,
para llevarte mi libertad.

Ya me dieron las tres,
hace tiempo pacté conmigo misma
no escribirte más canciones,
pero aquí estoy,
por tu culpa esta noche no dormiré.

Y tú ni siquiera te acordarás,
para ti sólo será un día más.

Ojalá que estos días
me cojan desprevenida
y sin querer puedan hacer que sonría.

Ojalá no me acuerde de ti
y no necesite
ver tu fotografía.

Alguien me dijo una vez,
que es cuestión de tiempo,
que las cosas pasan solas,
que ya veré.

Pero ojalá que estos días
me cojan desprevenida
y sin querer puedan hacer que sonría.

Ojalá no me acuerde de ti
y no necesite
ver tu fotografía.