Por más que pase el tiempo, todavía me duele ver la luz de tu ventana. Y no puedo evitar ilusionarme pensando que tú estarás al otro lado, como siempre. A veces pienso en ir a verte, pero entonces el sueño deja de ser perfecto y ese instante me empobrece.
(16 de julio de 2013)
No hay comentarios:
Publicar un comentario