SE TRASPASA 

Bajé la persiana otra vez y puse el cartel:

"Se traspasa."

Aquí ya ni se fía ni se oferta:

Carreras al amanecer sin tener la certeza de encontrarte,

rascar minutos, ir a contrarreloj, solo por besarte.

Remover mi calma, ensuciar las sábanas,

desordenar mi desorden,

maquillarme la cara y pelearme con mis ojeras cada mañana.

Se traspasa con todo:

Sinceridad sin límites,

empatía sin bordes,

caricias por la mañana,

besos en la espalda,

miradas auténticas,

las ganas de apostar

y el riesgo a perder,

y las cosas claras.

Poemas y canciones a la carta,

romanticismo en saldo,

pulsaciones a mil,

cronómetro a cero,

un tremendo despeinado,

unos cuantos orgasmos,

dos cuerpos empapados

y el cartel de ocupado.

La sonrisa de la mañana,

el desayuno en la cama,

el beso de despedida

y la espera cada día

de las palabras bonitas,

los te quiero y las llamadas

que siempre anhelaba.

Se traspasa por enfermedad.